CASTILLO DE MANZANARES

Un castillo protege del exterior, guarda lo más preciado. Si nos sentimos asediados es normal que queramos construir grandes muros. Pero lo que realmente nos libera, nos da fortaleza es nuestro fortín interior. Debemos cuidarnos de los vientos que nos zarandean y nos vuelven un poco locos. La locura está presente en nuestros días, como una respuesta de nuestro ser al caos que nos rodea. No sabemos qué batallas libramos cada uno de nosotros, pero sí sabemos que podemos contar con la ayuda de los que tenemos cerca.

SIEMPRE CERCA....